Desobediencia

Un rabino mayor, muy querido en su comunidad londinense, muere mientras pronuncia una homilía sobre la capacidad de elección del ser humano. Su única hija Ronit vive en Nueva York; hace años huyó allí escapando de la rigidez de las normas hebreas. Alguien le avisa de la muerte de su padre y vuelve a Londres a despedirse de él.

Donit, un amigo de la infancia y probable sucesor de su padre como rabino principal de la sinagoga, le ofrece alojarse en su casa. Ronit descubre que su antigua amiga Esti es la esposa de Donit. Y heridas dormidas y mal cicatrizados se reabren.

La película puede parecer fría, lenta, pero ese ritmo cadencioso y algo distante transmite eficazmente la sobriedad y cierta asfixia de la vida en las comunidades ortodoxas judías.

Poco a poco la emoción contenida se destapa y el film finalmente se convierte en un apasionado alegato sobre la búsqueda de la felicidad y la libertad de elección, que a veces chocan con algunas anticuadas y rígidas normas impuestas por las religiones.

Gran película y estupenda interpretación de las Rachel’s (Weisz y McAdams).

En mi caso no sabía nada de la película y, al principio me parecía evidente lo que iba a pasar; pero me equivoqué de plano y me sorprendió su temática, por lo que recomiendo no ver el trailer de abajo ni buscar más información si no se quiere perder ese elemento sorpresa.